Tenemos amaneceres, atardeceres y lunas llenas para disfrutar. Este tiempo es para nosotros, el momento de estar completamente presentes, de pasarlo bien y de estar unos con otros.
Lo que no está al alcance de los ojos puede llegar si los cerramos, porque imaginando, viajamos, nos entusiasmamos, creamos, construimos e incluso vivimos los sueños que tenemos.